En casos de debilidad física o psíquica, la mayoría de las veces nos agarramos como lapas a los “medicamentos” de turno que nos prometen ponernos a tope de energía. Ni siquiera leemos el prospecto y confiamos 100 por 100 en que esa será la mejor solución y la más rápida… pues esta idea está muy lejos de la realidad.

Hay miles de opciones mejores para remediar los estados de fatiga o debilidad y además más eficaces y naturales. Como siempre insisto, se trata de aprovecharnos de los nutrientes que nos puede aportar la alimentación antes de lanzarnos a comprar la cajita de pastillas milagrosas.

Una de estas opciones saludables es el mijo. Es un antiguo cereal considerado como un poderoso alimento sagrado y terapeútico por la medicina tradicional China.

Actúa como prebiótico nutriendo a la microflora intestinal. Es un cereal muy nutritivo, rico en fibra, vitaminas(B1, B9, B6, B2) y minerales, es de los que más hierro y magnesio aportan. Fuente natural de fósforo. Es un gran remedio para fortalecer la piel, el cabello, las uñas y los dientes. Ideal también para la diabetes y para quienes quieran adelgazar.

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Es importante destacar que el mijo alcaliniza el organismo, equilibrando nuestro PH. Ya hablamos del tema de la importancia de la alcalinidad en la preciosa entrevista que me hicieron desde el equipo de Alkanatur. Si no la viste, aquí la tienes.

Otro dato importante que debemos conocer y tener en cuenta es que el mijo, al igual que la quinoa, contienen antinutrientes llamado saponinas, que aumentan la permeabilidad intestinal. Disminuyen con el lavado previo a la cocción.

Aparte de cocinarlo hervido para cualquier receta de acompañamiento (en una publicación del 25 de Octubre ya os lo contaba en facebook), en ensaladas o cremas, otra opción es tomarlo como bebida vegetal, igual que os conté en esta publicación hablando de las bebidas de almendras y de soja.

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En el caso del mijo la proporción más o menos sería para media taza de mijo, 4 de agua. Se hace la mezcla con el agua caliente.

También se puede aprovechar la pulpa sobrante. Todavía no experimenté pero en cuanto tenga una receta rica os la cuento 😉

 

Espero que os haya servido la información, y sobre todo que lo pongáis en práctica para disfrutar de lo mejor de la vida que es la salud.

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¡Hasta pronto! 😉

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